lunes, noviembre 19, 2007

Doblista de sangre



Sebastián Prieto es de esos jugadores que no hacen mucho ruido, es de lo que no se hacen escuchar. Profesional desde 1996, lo llevan a tener una basta experiencia en el tenis de elite. Siempre desde abajo y en silencio, se las tuvo que rebuscar en el mundo del tenis jugando dobles. El dobles, que a esta altura parece ya un deporte paralelo al tenis y tan rebajado por los mismísimos jugadores- digase singlistas top- siempre tan admirado por el público y que ha entregado a lo largo de la historia partidos memorables, a tal punto de ser un partido tan decisivo en un match de Copa Davis. Por eso, es que tantas veces no alcanzamos a notar esa pequeña troupe de talentosos tenistas argentinos que juegan de a dos. Sebastián prieto es uno de ellos.
A esta altura del año puede sentirse orgulloso de ser el único jugador argentino que pudo festejar en los dos torneos mas importantes que se disputan en nuestro país. Se impuso junto a Martín Garcia en el ATP de Buenos Aires y en el Challenger del Vilas Club, junto al brasileño Marcelo Melo.
Entre su palmares, cuenta con 8 títulos ATP, dos de ellos en Buenos Aires y desde 2003 se ubica entre los 50º mejores doblistas del mundo, actualmente ocupa el puesto 37º siendo el mejor argentino. Además este año integró el equipo de Copa Davis en la serie ganada en el Parque Roca 4-1 frente al equipo austríaco; Prieto formó pareja con Acassuso cayendo en cuatro sets frente a Julian Knowle y Jurgen Melzer. También formó parte del equipo argentino en la caída de visitante frente a Suecia. En ese match, Alberto Mancini se inclinó por la pareja Nalbandian/Cañas para jugar el dobles, por ese motivo Prieto disputo el cuatro punto, con la serie definida a favor de los suecos, cayendo en dos sets frente a Jonas Bjorkman. A los 32 años, es uno de los mejores en su especialidad, en una arista del tenis que no cuenta con ciertos privilegios, que si tienen los singlistas. Por esa determinación y garra, sigue abriendose camino en tierra de gigantes.


Escuchá el diálogo exclusivo de Drop-Shot con Sebastián Prieto :