El pasto no es para las vacas

Es la historia viva del tenis. Allí, en el mismisimo All England Lawn Tennis and Croquet Club, es donde se forjó este deporte. La primera vez que se vió tenis sobre el césped inglés fué en 1877, lo que lo convierte en el torneo de Grand Slam más antiguo. Es el torneo que todos quieren ganar. Prestigioso si los hay, tuvo campeones a apellidos rutilantes tales como, Billie Jean King, Bjorn Borg, Martina Navratilova, Boris Becker,Pete Sampras, Roger Federer, y a tantos otros grandes de la historia del tenis.
Si miramos la historia de nuestro tenis y queremos sacar cosas positivas relacionándolas con Wimbledon, podemos ver varios momentos positivos, pero no son todos los que desearíamos tener. Si repasamos un poco, podemos traer a nuestra memoria la gran actuación de Gaby Sabatini en 1991, donde estuvo a punto de ganarle la final a Steffi Graf y conronarse en el abierto británico. No pudo ser pero fué de lo mejor.
Más aca en el tiempo, la gran corajeada de Nalbandian, que en silencio hizo mas ruido que el Big Ben cuando llega cada hora. Pero mas que eso no hay. Un par de cuartos de final de Vilas y los cuartos de David el año pasado. Pero nada mas, y lo mas triste que aparte de no poderse, no se quiere. Los nuestros le esquivan al pasto. Se entrenan con desgano o nisiquiera lo hacen, una falta de motivación total.
Tenemos a un grupo de jugadores que estan entre los mejores jugadores del mundo y sólo uno de ellos, por una cuestión de adaptabilidad y versatiidad, logró grandes resultados. Resulta muy triste saber que luego de este muy buen Roland Garros que pasó para los nuestros, no haya ningún argentino confirmado para jugar Wimbledon, y si miramos los cuadros de los torneos preparatorios no hay ningun compatriota anotado en dichos cotejos. Sólo Coria el año pasado hizo el intento de aprender, y mal no le fué. Tuvo una buena actuación e hizo octavos.
No es buena la sensación de saber que si Nalbandian no se recupera de sus dolores abdominales, no habrá casi chances de ganar aunque sea un par de partidos en Londres.
En este sentido estamos dándole la espalda a la historia grande del tenis y lamentablemente estoy en desacuerdo con Vilas cuando se refirió al cesped inglés como; "para las vacas".